¿Tener propósitos es en sí un propósito?

Uno de los grandes males de nuestra sociedad actual es la escasez de tiempo para todo, nos falta tiempo para dormir, para quedar con los amigos, para dedicarnos a esa afición que nos encanta y que nunca empezamos (léase pintura, escritura, natación, tocar algún instrumento y un largo etc), para ver más a la familia… mil y una situaciones que, a principios de año, nos proponemos cambiar o por lo menos intentarlo.

Esta falta de tiempo nos influye y entramos en una espiral en la que, sin darnos cuenta, estamos arrastrados de continuo, piensas, “tengo que quedar con Fulanito que hace siglos que no le veo” y al final acabas contactando con Fulanito a través de un reenvío masivo de algún mail graciosillo (por cierto, aunque sean a veces cargantes y nos saturen el correo, en ocasiones es la forma de no perder el contacto con algunas personas…)

Revisando la lista de los links que, hasta hoy, están en la parte izquierda del blog (“leo leo leo”) he visto, tristemente, que casi ninguno continúa con este afán narrativo, peeeeero, también se observa que pocos han cerrado el blog (poquitos han decidido dejar caer el telón virtual sobre sus vidas cibernéticas), ummm esto puede ser:

• En algún momento esperan volver a retomar su trocito de mundo web,
• Es posible que les guste entrar y ver de vez en cuando lo que escribían y vivieron tiempo atrás,
• O bien, sencillamente lo tienen olvidado y así quedará para los anales.

Chicos, me encantaría que se reanudaran vuestros blogs… aquí dejo la imagen con los nombres bloggers, esta semana que entra quitaré los no activos o los que llevan parados mucho, demasiado tiempo…

En breve, yo si he vuelto (aunque no con la asiduidad que me gustaría, si, si, la falta de tiempo jeje), más y mejor…